EXTINCIÓN DE LA FIESTA DELAS CRUCES
Al compás de la tinya y el pinkullo, al son de
la bandurria y algunas cantoras; las cruces
de algunas comunidades, barrios aledaños y partes altas de Tocas, bajaban a la iglesia
matriz para la misa y bendición anual por parte del obispo o cura.
La mañana del 3 de mayo, las capillas de las
comunidades donde tenían cruces amanecían con los "quillis". Estandartes en forma
de cruz hecho con cañas de azúcar, adornados con mantas, frutas, espejos, flores,
cintas y hasta utensilios domésticos.
Es mayo, mes de las cruces, aunque tenían diferentes
nombres, representaban la misma cosmovisión. Una mezcla de la imposición
católica y la tradición ancestral.
Este día; en la plaza principal de tocas se
congregaba jóvenes y muchachas, adultos y niños, ataviadas con vestimentas típicas como: en
caso de varones, manta o lliclla a la cintura, chalinas y chullos .En las mujeres sus ropas
representaban la alegría por sus colores vivos, sombreros con huaytillas y
adornos resplandecientes. Bailaban en la puerta de la iglesia y en la tarde
retornaban a sus lugares de origen.
Sin duda
la bandurria era infaltable en
esta fiesta, cuyas melodías alentaban a que jugaran el “champacha” o “cuchuscha”,
como retos de valor entre
jóvenes y adultos, que bajo el manto de la noche del 3 de mayo, median
su destreza para el baile, fuerza y resistencia.
Mientras las damas contagiadas del ambiente
festivo entonaban canciones de aliento a
los varones en competencias.
Pero las nuevas generaciones y el tiempo
vienen también con nuevas tendencias y esto se acabó. La mayoría de las cruces desaparecieron
y esta bonita costumbre se fue con ellos y con
personajes pasados.
Las personas que todavía vivieron esa época
recordarán con nostalgia aquellas costumbres que identificaban al pueblo y
hacían que uno quiera más a su pueblo y se identifique con su música,
vestimenta, comida y su gente.
P.D. La comunidad de
Tacsanapampa tenía una cruz denominada “santa cruz”.