LOS CABELLOS DE MI NIÑA
En un esquinal hastiado de calor,
una niña, mi niña, ha purificado sus cabellos.
Lacios, exuberantes
Puros y brillantes
El peine garzo juguetea con ellas,
extraviándolos y matizándolos.
Rayos finos y multicolores del sol,
porque tras los nimbos se disimulan,
acaso se han rendido,
ante la finura y monocromía castaña,
de los cabellos de mi niña?
Pardas, espiritosas y acrobáticas golondrinas,
porque su armonioso vuelo han cesado,
más acaso; pasioncilla les ha causado,
el baile al compás de las brisas del ocaso,
de los cabellos de mi niña?
Pero mientras, presuntuosas ellas,
con elegancia destellante bailan hacia el sur.
Parece que pretenden abandonar a mi niña.
Con sus blancas manos las adiestras hacia mí.
Y ahora me instigan a que me acerque
A esa niña, a mi niña.
VICTORIA
En la pradera semental,
Tundra insania.
Misticismo occidental,
Divaga… Victoria.
Voraz noctambul,
Su espíritu cautiva.
Infinito azul,
Su hechura abraza.
Victoria, Victoria,
Manto purpura.
Cresta algarabía,
Con toda soltura.
Ojitos castaños,
a donde vislumbras.
Esos tenues crepúsculos,
son las centellas.
De tu cándido silencio;
en el campo estroncio.
De esta baquía
…Victoria
