SANTIAGO EN TODO EL AMBITO DE TAYACAJA - COLCABAMBA
En uno de los sucesos del tiempo pasado, nace una identificación de Santiago-illapa, que se manifestaría en formas de sincretismo religioso, extranjero y autóctono. Es en España allá por el siglo XVI que creían que cuando tronaba era el caballo de Santiago; apóstol mayor que fundó la iglesia católica en España, que galopaba por los cerros y era costumbre de los soldados españoles de la conquista vocear e invocar al apóstol Santiago antes de iniciar a disparar sus arcabuces. Ambos hechos hicieron que los indígenas asociaran a Santiago con el rayo o illapa. El apóstol pierde dicha categoría al estar en el Perú antiguo para asumir cualidades peculiares de divinidad andina. Principalmente de caza de animales.
De ahí que la fiesta de Santiago es considerada como el día de los animales y pastores, basándonos en la superstición de considerar al tayta Wamani como dueño y señor de los cerros.
Wamani es el dios principal aborigen; en nuestra zona son los cerros más altos que infunden respeto, temor y actitud sagrada.
Es padre, señor, rico y poderoso; es el protector de gente y animales, hace producir las chacras, crecer las flores en sus laderas, le pertenecen las hierbas de las punas y los claveles.
Son sus animales todos aquellos que pastan en las alturas.
El cóndor es su gallina, la vizcacha es su mula y su caballo, la taruka es su llama que transporta oro y plata. El guari es su guanaco, el zorro es su perro que cuida sus ganados y los pumas son sus gatos. Las lagunas son su sangre y los ríos son sus venas, las cuevas son sus puertas las fuentes de agua sus ojos. Cuando son agredidos; para evitar que hieran su corazón puede trasladar sus riquezas, a veces se defiende derrumbando caminos, cubriéndose con espinas. Si no le respetan, saludan y agradecen, puede enviar nieves, heladas; hacer extraviar animales o enviar ladrones.
UN MITO QUE SE CUENTA HASTA NUESTROS DIAS...
Cuando todavía era joven; mi abuelo pasaba siempre por el camino de palca hacia la loma, porque tenia una amante. Una noche, el 24 de julio, cuando caminaba por la altura escuchó un paseo de Santiago. Había escuchado cantoras y yungor. Mi abuelo se había dicho: ”Tal vez mi amada estará allí con otro, voy a encontrarlo”. Cuando llego al lugar de donde provenía la dulce melodía y escuchado el paseo, desapareció el ruido y todo rastro de gente. Solo encontró una tinya de bronce.
Había sido el Wamani que hacía Santiago.
Hay campesinos que han escuchado que los wamanis se invitan para los paseos diciéndose: ¡tayta churiaqasa, huaychaw, pasen ps!. Porque también ellos hacen su señal a los venados y vicuñas. Cuando cazan venados, les encuentran con las orejas cortadas. Hay personas cazadores que encuentran al venado con las cintas en las orejas sabiendo que esos animales son salvajes y no están en contacto con ningún hombre.
Cortesia: Extraido de Mitos ganaderos andinos de Nestor Godofredo Taipe _ Colcabamba
